Capítulo XXV
LA
FATALIDAD.
Cuando llegó la edad negra se cerraron los Colegios Iniciáticos.
Esa fue la fatalidad. Desde entonces, las grandes Logias Negras que nacieron
entre las tinieblas arcaicas de los antiguos tiempos, se hicieron de hecho más
activas. El límite de la luz son las tinieblas. Junto a todo templo de luz
existe otro de tinieblas, y donde la luz brilla más claro, las tinieblas se
hacen más espesas.
Los colegios Iniciáticos de Egipto, Grecia, India, China, México,
Yucatán, Perú, Troya, Roma, Cartago, Caldea, etc., etc., tuvieron sus antípodas
peligrosas, sus fatales antítesis, escuelas tenebrosas de Magia Negra, sombras
fatales de la luz.
Esas escuelas de Magia Negra constituyen la sombra de los Colegios
Iniciáticos. Cuando se cerraron dichos colegios, esas escuelas fatales se
hicieron activísimas.
No es extraño hallar entre esos antros de la Logia Negra, términos,
ciencias y rituales semejantes a aquellos que se usaron en los Colegios
Iniciáticos. Esto confunde a los devotos de la Senda. Por naturaleza, el devoto
es amante de lo “raro”, de lo “exótico”, de lo lejano, de lo “imposible”, y
cuando encuentra a un Mago Negro de este tipo, hablando de los misterios
egipcios, mayas, aztecas, incas, griegos, caldeos, persas, etc., etc., cree
entonces ingenuamente haber cogido a Dios por las barbas, y se entrega en manos
del Mago Negro creyéndole blanco.
Esta clase de Magos de las tinieblas abundan donde quiera que existieron
Colegios Iniciáticos. Ello son la antítesis de esos colegios y hablan como
Maestros, presumiendo siempre de Iniciados de dichos colegios. Nunca dicen nada
que pueda despertar sospechas. Se muestran bondadosos y humildes, defienden el
bien y la verdad, asumen poses tremendamente místicas, etc. En semejantes
condiciones es claro que el devoto ingenuo e inexperto abandona la Senda del filo
de la Navaja y se entrega de lleno en manos de esos lobos vestidos con piel de
oveja. Esa es la fatalidad.
Esas escuelas de Magia Negra abundan por todas partes. Recordemos a la
secta disidente de los Mayas. Sus Adeptos fueron expulsados de la Logia Blanca
Maya. Son Magos Negros. Dicha escuela se halla establecida entre Yucatán y
Guatemala. Actualmente esta escuela de Magia Negra maya, tiene agentes activos
en México y Guatemala. Empero, ¿quién se atrevería a dudar de esos tenebrosos
que se dicen príncipes mayas y grandes sacerdotes? Esos señores todavía hablan
con mucha reverencia de TEOTL. Dios Supremo, creador y mantenedor del mundo. Se
extasían recordando a Bacabes, la trinidad maya, y a Camaxtle, castigador de
los malos, etc. Resulta en estas circunstancias muy difícil descubrir a
semejantes tenebrosos. Cuando el devoto se les entrega, entonces lo llevan a
sus templos donde lo inician. Es claro que el devoto se hace Mago Negro en la
forma más ingenua. Un devoto en estas circunstancias jamás aceptaría que se le
calificase de Mago Negro. El abismo está lleno de equivocados sinceros y de
gentes de muy buenas intenciones.
Así, tanto a orillas del Nilo, como en la tierra sagrada de los Vedas,
aparecen muchos tenebrosos de este tipo. Realmente ellos ahora están muy
activos, luchando por engrosar sus filas.
Si el estudiante quiere una clave para descubrir a estos personajes de
la sombra, nosotros se la damos con mucho gusto. Habladle al personaje de la
Magia Sexual blanca sin derramamiento de semen. Mencionadle la castidad
científica; decidle que tú jamás derramas tu semen: esa es la clave. Podéis
estar seguro de que si el personaje sospechoso es realmente Mago Negro, tratará
por todos los medios de convenceros de que la Magia Sexual es dañosa para la
salud, que es perjudicial, y os insinuará la idea de derramar el semen.
Cuidaos, buen discípulo, de esta clase de sujetos que os aconsejan
derramar el Vaso de Hermes. Esos son Magos Negros. No os dejéis seducir por sus
dulces palabras ni por sus exóticos modales, ni por los raros nombres. Todo
devoto que derrame el Vaso de Hermes cae en el abismo de la fatalidad,
inevitablemente. Sed vigilante. Recordad que la Senda del Matrimonio Perfecto
es la Senda del filo de la Navaja. Esta Senda está llena de peligros por dentro
y por fuera. Muchos son los que comienzan pero es muy difícil hallar alguien
que no se salga de la Senda.
Me viene a la memoria el caso de un Iniciado del tiempo del conde
Cagliostro. Dicho estudiante practicó Magia Sexual intensamente con su esposa,
y como es natural, adquirió grados, poderes, iniciaciones, etc. Todo andaba muy
bien hasta el día en que tuvo la debilidad de contarle a un amigo ocultista
también sus asuntos íntimos. El tal amigo se escandalizó y armado de grande
erudición, le aconsejó al Iniciado abandonar la práctica de Magia Sexual sin
eyaculación del semen. Las enseñanzas del equivocado amigo extraviaron al
Iniciado. Desde entonces, éste se dedicó a practicar Magia Sexual derramando el
Vaso de Hermes. El resultado fue desastroso. El Kundalini del Iniciado
descendió hasta el centro magnético del coxis. Se perdieron grados y poderes,
espada y capa, túnicas y mandos sagrados. Esto fue un verdadero desastre. Esta
fue la fatalidad.
Es bueno saber que a los Magos Negros les encanta fortificar la mente.
Aseguran éstos que sólo por la mente se puede el hombre parecer a Dios. Los
Magos de las tinieblas odian mortalmente la castidad. Se encuentran por
millones los devotos de la Senda que abandonaron el Camino del Matrimonio
Perfecto para hacerse discípulos de la Logia Negra. Sucede que a los devotos
del ocultismo les atrae lo “raro”, lo novedoso y misterioso, y cuando
encuentran a un Mago de estos “raros”, inmediatamente se entregan en sus manos
como cualquier vulgar prostituta de la mente. Esa es la fatalidad.
Quien quiera nacer como Ángel Cósmico, quien quiera de veras convertirse
en un Ángel con poderes sobre el fuego, el aire, las aguas y la tierra, quien
quiera convertirse en un Dios, tiene de hecho que no dejarse atrapar de todas
esas peligrosas tentaciones.
Es muy difícil hallar personas que sean tan firmes y constantes como
para no abandonar jamás la Senda del Matrimonio Perfecto. El ser humano es
demasiado débil. Esa es la fatalidad.
“Muchos son los llamados y pocos los escogidos”. Conque logremos que
unos pocos seres se eleven al estado angélico nos damos por satisfechos.
EL AMOR, ÚNICO CAMINO DE SALVACIÓN
Los enemigos del Amor se llaman fornicarios. Estos confunden al Amor con
el deseo. Todo Mago que enseñe la eyaculación del semen, es Mago Negro. Toda
persona que derrame el licor seminal, es fornicaria. Es imposible llegar a la
Auto-Realización íntima, mientras no se mate el deseo animal. Aquellos que
derraman el Vaso de Hermes son incapaces de amar. El Amor y el deseo son
incompatibles. Quien derrama el Vaso de Hermes es víctima del deseo animal. El
Amor es incompatible con el deseo y la fornicación.
EL SUFISMO
Lo más inefable del misticismo mahometano es el sufismo persa. Este
tiene el mérito de luchar contra el materialismo y el fanatismo, así como
contra la interpretación a la letra muerta del Corán. Los Sufis interpretan el
Corán desde el punto de vista esotérico, así como nosotros los gnósticos
interpretamos el Nuevo Testamento.
Lo que más desconcierta a los occidentales es la extraña y misteriosa
mezcla de lo erótico con lo místico en la religiosidad oriental y en la mística
sufi. La teología cristiana ha considerado a la carne como hostil al Espíritu,
pero en la religión musulmana, la carne y el espíritu son dos substancias de
una misma energía. Dos sustancias que se deben ayudar mutuamente. Esto sólo lo
entienden los que practican Magia Sexual positiva. En Oriente, la religión, la
ciencia, el arte y la filosofía son enseñadas como lenguaje erótico y
exquisitamente sexual. “Mahoma se enamoró de Dios”, dicen los místicos árabes.
“Escoge para ti nueva esposa cada primavera del año nuevo, porque el calendario
del último año no es bueno”, dice un poeta y filósofo persa.
Quienes hayan estudiado cuidadosamente el “Cantar de los Cantares”, del
sabio Salomón, encontrarán esa delicada mezcla de lo místico con lo erótico que
tanto escandaliza a los infrasexuales.
La religión verdadera no puede renunciar a lo erótico, porque sería su
muerte. Muchos mitos y leyendas antiguas se fundamentan en lo erótico. El amor
y la muerte constituyen, de hecho, la base de toda auténtica religión.
Los Sufis, poetas persas, escribieron sobre el Amor de Dios en
expresiones aplicables sobre hermosas mujeres. Esto escandaliza a los fanáticos
del infrasexo. La idea del sufismo es la unión amorosa del Alma con Dios.
Realmente, nada puede explicar mejor la unión amorosa del Alma con Dios,
como la unión sexual, deliciosa, del hombre y la mujer. Esa es la brillante
idea del sufismo. Si se quiere hablar de la unión de Dios y del Alma debemos
hacerlo en el lenguaje erótico del Amor y del Sexo. Solo así podemos decir lo
que tenemos que decir.
El lenguaje simbólico de los Sufis tiene expresiones maravillosas.
Sueño, entre ellos, significa meditación. Realmente, la meditación sin sueño
daña la mente. Esto lo sabe todo verdadero Iniciado. Hay que combinar el sueño
con la meditación. Esto lo saben los Sufis. La palabra perfume simboliza
esperanza del divino favor; besos y abrazos significan entre ellos, embeleso en
la piedad; vino quiere decir conocimiento espiritual, etc., etc.
Los poetas Sufis cantaban al Amor, a las mujeres, a las rosas y al vino,
y sin embargo muchos de ellos vivían vida de ermitaños.
Los siete estados místicos descritos por los Sufis son algo
extraordinarios. Existen ciertas sustancias químicas muy relacionadas con los
estados místicos: el óxido nitroso y el éter; especialmente el óxido nitroso,
cuando se disuelve suficientemente con aire, estimula la Conciencia mística en
grado extraordinario.
Tenemos que reconocer que la humanidad actual es subconsciente. Gente
así es incapaz de conocer las dimensiones superiores del espacio. Es urgente
despertar la Conciencia y esto sólo es posible durante el éxtasis. Si
analizamos con lógica dialéctica el éxtasis, descubrimos que este es sexual.
Las mismas energías sexuales que se expresan con el goce erótico, cuando se
transmutan y subliman, despiertan la Conciencia y producen entonces el éxtasis.
La fatalidad es perder el éxtasis, caer en la subconciencia nuevamente.
Esto sucede cuando derramamos el Vaso de Hermes.
Un gran Maestro dijo: “En el impulso sexual, el hombre se coloca en la
relación más personal con la Naturaleza. La comparación de la sensación de la
mujer, experimentada por el hombre, o viceversa, con el consentimiento de la
Naturaleza, es realmente la misma sensación que brinda el bosque, la llanura,
el mar, las montañas, sólo que en este caso es todavía más intenso, despierta
voces más internas, provoca el sonido de cuerdas más íntimas”. Así llegamos al
éxtasis.
El éxtasis, la experiencia mística, tiene sus principios fundamentados
en la Lógica Dialéctica. Esta lógica no puede ser violada jamás. Reflexionemos,
por ejemplo, en la Unidad de la experiencia. Este principio existe tanto entre
los místicos del Oriente como entre los del Occidente; tanto entre los
Hierofantes de Egipto, como entre los sabios Sufis, o entre los magos aztecas.
Durante el éxtasis, los místicos parlan en el mismo lenguaje universal, usan
las mismas palabras, y se sienten unidos a todo lo creado. Las escrituras
sagradas de todas las religiones demuestran los mismos principios. Esto es
Lógica Dialéctica. Lógica Superior. Esto prueba que los místicos de todos los países
del mundo beben en la misma Fuente de Vida. Las condiciones de las causas del
mundo, otro de los principios de la Lógica Dialéctica, demuestra, con la
completa concordancia de datos, exactitud y precisión, realidad y verdad del
éxtasis. Los místicos de todas las religiones del mundo concuerdan totalmente
en sus afirmaciones sobre las condiciones de las causas del mundo; la
concordancia es, pues, perfecta.
La Unidad de Vida, es otro de los principios de la Lógica Dialéctica.
Todo místico en éxtasis percibe y siente la Unidad de la Vida. Las
matemáticas del Infinito y de la Lógica Dialéctica, no pueden fallar jamás.
Quien derrama el Vaso de Hermes pierde el éxtasis, sus visiones ya no están
incluidas dentro de la Lógica Dialéctica; se cree, sin embargo, súper
trascendido, viola los principios de la Lógica Dialéctica y cae en la locura de
lo absurdo. Esa es la fatalidad.
Todo estudiante gnóstico debe alejarse del Tantrismo negro y de aquellos
que enseñan Magia Sexual negra, si no quiere caer en el abismo de la fatalidad.
Los disidentes de las antiguas escuelas arcaicas, están, durante este
Kali-yuga, muy activos.
Los Magos Negros están haciendo, por esta época, una tremenda campaña,
con el propósito de imponer el falso conocimiento en la época que está comenzando.
Ellos quieren el triunfo de la Logia Negra.
INFRASEXO EN LA YOGA
Las siete escuelas de Yoga son arcaicas y grandiosas, pero no podían
escapar a los fines tenebrosos. Actualmente existen muchos infrasexuales que
buscan prosélitos y forman escuelas de yoga. Esos individuos odian mortalmente
la Senda del Matrimonio Perfecto. Aborrecen la Magia Sexual blanca. Algunos de
ellos enseñan Tantrismo negro; esa es la fatalidad.
La verdadera yoga se basa en la Magia Sexual blanca. Yoga sin Magia
Sexual es doctrina infrasexual, propia para infrasexuales.
En el Kama Kalpa y en el Budhismo Tántrico se encuentran los legítimos
fundamentos de la Yoga. El Ahamsara y el Maithuna son, de hecho, las bases de
una verdadera yoga. Ahamsara (disolución del yo); Maithuna (Magia Sexual); ahí
está la verdadera síntesis de la yoga.
Quienes se han internado en un monasterio de Budhismo Zen, saben muy
bien que el Maithuna y la disolución del Ego reencarnante constituyen los
fundamentos de la auto-yogui Babají. Este no fue célibe. Quienes creen que
Matají es su hermana carnal, están equivocados. Matají es su esposa
sacerdotisa. Con ella se auto-realizó íntimamente.
El Budhismo indio, como el Budhismo Zen y Chan, son tántricos. Sin
Tantrismo blanco la yoga resulta un fracaso. Esa es la fatalidad.
El Budhismo chino y el japonés son completamente tántricos. No hay duda
de que el Budhismo Chan y Zen marchan realmente por el camino de la
Auto-Realización Intima.
La yoga sexual es grandiosa en el Tíbet secreto. Los grandes Maestros
del Tíbet practican Magia Sexual.
Un gran amigo mío me escribió desde la India diciendo: “En el Tantrismo
hindú y tibetano, la yoga sexual positiva (Maithuna) se practica sin
derramamiento seminal, después de una preparación, en la cual la pareja, bajo
la dirección de un Gurú experto, aprende a realizar las prácticas de Laya Kriya
juntos; luego se procede a la Sadhana Tántrica en la cual el esposo debe
introducir el miembro viril en la vagina. Esta operación se efectúa después de
un intercambio de caricias por parte de la pareja”. “El varón se sienta con las
piernas cruzadas en una asana (postura) y la mujer absorbe el falo. La pareja
permanece en connubio por un largo tiempo sin moverse, tratando de que el Ego y
la Conciencia analítica no intervengan, dejando que la naturaleza actúe sin
interferencia”. “Entonces, sin expectación del orgasmo, las corrientes eróticas
entran en acción provocando el éxtasis. En ese instante el Ego se disuelve (se
retira) y se transmuta el deseo en Amor”.
“Intensas corrientes semejantes a las electromagnéticas, que producen
estáticos efectos, recorren los cuerpos; una sensación de dicha inefable se
posesiona de todo el organismo, y la pareja experimenta el éxtasis de Amor y la
comunión cósmica”.
Hasta aquí el relato de mi amigo cuyo nombre no menciono. Este relato lo
odian los infrasexuales metidos dentro de la yoga. Estos quieren trabajar desde
la yoga para aumentar los fanáticos del infrasexo. Esa es la fatalidad.
La yoga sin Magia Sexual es como un jardín sin agua, o como un automóvil
sin gasolina, o como un cuerpo sin sangre. Esa es la fatalidad.
MAGIA AZTECA
En los patios empedrados de los aztecas, hombres y mujeres permanecían
desnudos durante mucho tiempo, besándose y acariciándose mutuamente y
practicando Magia Sexual. Cuando el Iniciado cometía el crimen de derramar el
Vaso de Hermes, era entonces condenado a pena de muerte por haber profanado el
templo. El delincuente era decapitado. Esa es la fatalidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario